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El parque automotor de la ciudad ha crecido exponencialmente, sobre todo en lo que a motos se refiere. En tal sentido ser un peatón y tratar de caminar por las veredas de la ciudad es un verdadero acto de valentía
Recorrer la ciudad a pie es una verdadera aventura, motos y autos estacionados en cualquier lugar, vecinos que lavan sus autos en las veredas o estacionan en la vereda en la entrada de sus garajes, son algunas de las faltas que se repiten día a día sin ningún tipo de control.
En lo que respecta a las motos es aún peor, no solo estacionan en cualquier parte dificultando el caminar, si no también tapan vidrieras, entradas, paradas de colectivos… no hay un mal lugar para dejar la moto.
Esto sin contar a los vecinos que ocupan la calle como depósito para descartar los desechos de obras que se realizan en el interior de sus propiedades.
