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Así lo manifestó la tía del bebé que recibió una feroz golpiza y se encuentra internado en el Juan Pablo II. Señaló que le preguntó por qué lo hizo y la respuesta fue por venganza a su hermano. La mujer y su pareja están demorados.
Ramona Castillo es la tía de Benjamín, el bebé de 20 meses que se encuentra internado en el hospital Pediátrico con múltiples lesiones. Ayer, en una improvisada conferencia de prensa manifestó que “la mamá del niño aseguró que decidió golpear a su hijo por venganza”. Por el caso hay dos demorados.
Mientras la Justicia comienza a dar los primeros pasos en un caso que conmovió a la provincia, la familia aguarda la recuperación del bebé. Aunque vale aclarar que en esta historia, la familia se encuentra dividida. Por un lado, se encuentran los allegados del padre biológicos -de nombre Luis Castillo- y por el otro, los de la madre María Belén Romero.
Romero es señalada por su expareja por los golpes que recibió su hijo en distintas partes del cuerpo.
En comunicación con época, Castillo informó que el pasado domingo formalizó la denuncia ante la comisaría Segunda del Menor y la Mujer y que el pasado 12 de diciembre realizó una exposición por el estado en que observó a su bebé.
“En diciembre fue el último contacto que tuve con Benjamín, ese día lo vi con golpes en distintas partes del cuerpo. Si bien no eran como los que actualmente tiene, era por demás llamativos. Por tal motivo, decidí realizar una exposición en la Policía. Desde allí no puede verlo más por la negativa de la madre”, dijo a época el papá biológico en una ronda de prensa realizada en uno de los accesos al hospital Juan Pablo II.
Además mencionó que desde su separación -fue hace un año y medio- no mantiene contacto con Romero y quien se encargaba de acercar al niño era la abuela materna. “Mi exsuegra intermediaba para que yo vea al nene porque ella no quería hacerlo”, agregó el hombre quien comentó que fue la propia abuela materna quien se comunicó con sus familiares para informarle el estado en que se encontraba el niño.
Tras esa comunicación el viernes pasado decidieron realizar el rescate. Quien hizo de nexo fue Ramona Castillo y junto al apoyo policial pudieron rescatar a la criatura de una vivienda del barrio Esperanza.
Cuando Benjamín llegó al hospitaI, los médicos se sorprendieron por las lesiones que tenía.
De ese día y hasta el lunes no se supo nada de la madre del menor. Recién anteayer alrededor de las 17, María Belén decidió acercarse al centro asistencial para ver a su hijo. La mujer estaba acompañada de su actual pareja. Ambos llegaron al hospital en una motocicleta, pero la única que intentó ingresar a la sala donde está internado el niño fue Romero. Situación que fue imposible por el impedimento de los familiares del padre biológico.
Allí se generó un “encontronazo”, donde no faltaron los insultos. En un momento dado Ramona Castillo le preguntó “por qué le provocó las lesiones a su sobrino y la respuesta fue que lo hizo por venganza”. “No podía creer lo que escuché. Puede ser entendible que tenga diferencias con mi hermano pero de ahí que agrada al bebé de esa manera es otra cosa”, argumentó la mujer.
Mirta Mayol -otra de las familiares de Castillo- ante la presencia de María Belén entró en un estado de nerviosismo y pidió a gritos intervención de la Policía para detenerla. “No entiendo nada de cuestiones judiciales pero ante la gravedad del hecho pedíamos que la detengan.
Algunos efectivos me decían que no podían hacer nada porque no tenían la orden judicial. Minutos más tarde se acercó personal de la Dirección de Investigación Criminal (DIC) y procedió a la demora de las dos personas”, informó la mujer.
Tanto Romero como su pareja fueron trasladados a la sede de la DIC y cerca de las 22 del lunes fueron puestos en libertad. Recién ayer llegó la orden de la Justicia y la Policía volvió a aprehenderlos.
En la causa interviene el fiscal Gustavo Alejandro Robineau y el Juzgado de Menores a cargo de Irma Domínguez.
